Accesibilidad en el Cine: Una Llamada a la Acción
Un sector que necesita cambios urgentes
El acceso a la cultura es un derecho fundamental, pero para muchas personas con discapacidad, este derecho sigue siendo un sueño lejano. En este contexto, el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) ha lanzado una propuesta contundente al Congreso de los Diputados: establecer una regulación estricta sobre la accesibilidad en el cine y en la cultura audiovisual. La iniciativa surge ante la alarmante realidad de que las normativas actuales son «escasas y laxas», dejando a millones de ciudadanos al margen de una experiencia cultural enriquecedora.
Con la firme intención de cambiar esta situación, CERMI ha presentado un documento que detalla una serie de enmiendas al Proyecto de Ley del Cine y de la Cultura Audiovisual. La propuesta no solo busca garantizar el acceso a películas y series, sino que también aspira a una representación «respetuosa y positiva» de las personas con discapacidad en la pantalla grande.
La Inclusión Comienza en la Producción
Una de las exigencias más destacadas de CERMI es que todas las producciones cinematográficas y audiovisuales incluyan desde su origen medidas de accesibilidad. Esto significa que, desde el momento en que se inicia un proyecto, debe contemplarse la subtitulación, la lengua de signos española y la audiodescripción. Según el CERMI, esta inclusión no es solo una cuestión de cumplimiento normativo, sino un paso necesario para garantizar que todas las personas, independientemente de sus capacidades, puedan disfrutar de la cultura en igualdad de condiciones.
La falta de ambición en el Proyecto de Ley enviado por el Gobierno ha llevado a CERMI a criticar su «insuficiente respuesta» a las demandas del movimiento social de la discapacidad. En palabras de la organización, «las disposiciones existentes están lejos de garantizar el ejercicio de los derechos de las personas con discapacidad, especialmente las sensoriales». La lucha por una legislación que no solo sea un marco teórico, sino que tenga un impacto real en la vida de las personas, es más urgente que nunca.
La Responsabilidad de los Cineastas
Uno de los puntos más controvertidos de la propuesta de CERMI es la recomendación de que no se concedan subvenciones ni apoyos públicos a las producciones que no incorporen medidas de accesibilidad. Esta exigencia, que busca elevar el estándar de inclusión, se basa en la premisa de que la cultura no puede ser un privilegio para unos pocos. Las ayudas públicas, que deberían fomentar la diversidad y la inclusión, deben estar condicionadas a un compromiso real con la accesibilidad.
Además, CERMI recalca que esta normativa también debe aplicarse a las actividades de promoción de la cinematografía. Las entidades o individuos que incumplan con la reserva legal de puestos de trabajo para personas con discapacidad tampoco podrán beneficiarse de estas ayudas. La inclusión no es solo una cuestión de acceso a la cultura; es también un tema de empleo y oportunidades en un sector que, históricamente, ha sido excluyente.
La Filmoteca Española: Un Papel Clave
La propuesta de CERMI no se detiene en el ámbito de la producción cinematográfica. También aboga por que la nueva Ley del Cine establezca que la Filmoteca Española implemente programas para dotar de medidas de accesibilidad a sus fondos cinematográficos y audiovisuales. Esto incluiría una atención prioritaria a aquellas obras que poseen mayor significación artística, histórica o social.
El compromiso de la Filmoteca con la accesibilidad puede ser un cambio de juego. Al permitir que más personas disfruten de su rica colección de cine, se convierte en un bastión de inclusión y diversidad. Las iniciativas que fomenten la accesibilidad son esenciales para derribar las barreras que aún persisten en el ámbito cultural.
Un Futuro con Inclusión
La propuesta de CERMI es un paso hacia un futuro donde el cine y la cultura audiovisual sean accesibles para todos. La lucha por la visibilidad y el respeto hacia las personas con discapacidad no solo se da en el ámbito legislativo, sino también en la conciencia colectiva de la sociedad. La representación en el cine tiene el poder de cambiar percepciones y fomentar la inclusión.
La cultura es un espejo de la sociedad, y si queremos que ese espejo refleje una imagen más justa y equitativa, es necesario que se escuchen todas las voces. La propuesta de CERMI al Congreso no es solo un llamado a la acción; es una invitación a reflexionar sobre el papel que desempeñamos todos en la construcción de una cultura inclusiva.
Mientras el Congreso evalúa estas propuestas, la comunidad espera que se tomen decisiones que no solo se queden en papel, sino que se traduzcan en acciones concretas. La accesibilidad no debe ser una opción, sino una obligación, y la cultura debe ser un espacio donde todos, sin excepción, puedan entrar y disfrutar.
Fuente de la imagen: Diario Noticias Salamanca 24 Horas.